¿Se puede esta cómoda sin perder el estilo? ¡Sí! Con estas reglas de cómo vestir en casa lucirás estupenda ya sea para trabajar, arreglar tu hogar o simplemente para descansar.
El estar en casa no debe significar dejadez ni lucir prendas con las que nunca saldrías a la calle. Hay numerosas opciones de outfits para estar en casa cómodas y con estilo.
El cuidar tu imagen cuando no salgas de casa, te aportará una actitud de bienestar y descanso. Por eso, cumple con tu rutina como si fueras a salir de tu hogar.
CÓMO VESTIR EN CASA
Arréglate a primera hora de la mañana, cuando despiertes. Caso contrario, ya no lo harás en el resto del día, pues ya te acostumbrarás a tu imagen desaliñada.
Las pijamas son exclusivamente para dormir, así que no las uses durante todo el día en casa. Así como no irías a la cama con las prendas que luciste en la calle, igual sucede con la ropa de dormir.
Cuántas veces te ha pasado que al cocinar te brinca aceite o te manchas con alguna salsa; o tu mimado de 4 patas se apoya sobre ti con las patas sucias. ¡Imagina ir a la cama con estas prendas! Mejor usa tu pijama limpia para descansar con un agradable aroma.
Te ha sucedido que llega una visita inesperada y te toca correr a cambiarte de ropa. Entonces, luce prendas de las que no te avergonzarías salir a la calle o recibir visitas.
Es decir, no uses prendas viejas o manchadas, realiza las combinaciones correctas tanto de los colores como con el calzado adecuado.
Existen prendas ideales para estar en casa, elige las que no aprieten, que sean suaves y, por lo general, de colores neutros. Pero si vas a realizar las tareas del hogar serán mejor los colores oscuros para evitar las manchas.
Desecha las prendas viejas. Opta por pantalones de punto o leggins, y combínalos con camisetas cómodas de algodón.
Para la temporada de frío las sudaderas serán una opción.
Los pantalones deportivos se pueden combinar con un jersey o camiseta holgada, según lo han lucido varios influencers.
DATOS
No olvides de peinarte. Basta con un recogido informal con el que, al mirarte al espejo, te veas bien.
Tampoco dejes de maquillarte. No es necesario que te arregles como cuando vas a la calle, pero el arreglar tu mirada y tu sonrisa te brindarán buen ánimo en casa.