Leonard Nimoy y su viaje a las estrellas eterno
Leonard Simon Nimoy fue un actor, director, poeta, y fotógrafo conocido por su papel de Sr. Spock de Star Trek o Viaje a las Estrellas.
Nació el 26 de marzo de 1931 en Boston, Massachusetts (Estados Unidos), hijo de judíos inmigrantes de Ucrania seguidores del judaísmo ortodoxo, ha sido quizás el único de los actores del «Star Trek» original junto con William Shatner, que ha sido capaz de mantener una vida artística coherente y fructífera al margen de la enorme sombra de la serie y para muchos, el más dotado de facultades.
Leonard Nimoy comenzó su carrera como niño actor en Boston. Estudió en la escuela teatral de Boston College. En 1951, ganó un papel pequeño en la película Queen for a Day. Esto condujo a otros papeles en el teatro y las películas.
OTROS TRABAJOS
Pero fue también un hombre hiperactivo que realizó variados trabajos. En Los Ángeles de los primeros años 1950, acuciado por la necesidad, Nimoy no dudó en aceptar empleos tan poco frívolos como el de portero, limpiador de peceras en una veterinaria o taxista. Antes de esto, sirvió dos años en el ejército de los Estados Unidos, de donde se retiró con el grado de sargento.
Como si hubiera intuido que la ciencia ficción era el registro que mayores satisfacciones le iba a proporcionar, el actor vinculó su carrera al género desde sus mismos comienzos.
En 1952 fue reclutado por la Republic para trabajar en Zombies of the Stratosphere, un serial de 12 episodios; dos años más tarde, fue un soldado en La humanidad en peligro, la obra maestra de Gordon Douglas.
En los años 1960, se introdujo en el mundo de la televisión, entre sus intervenciones más notorias se cuentan las que hizo en «The Twilight Zone» (1961), «The Outer Limits» (1964), «The Man from U.N.C.L.E.» (1964, episodio en el que coincidió con William Shatner) o en la serie de Gene Roddenberry, The Lieutenant, en la que Leonard Nimoy realizó un trabajo que sirvió para que el creador de «Star Trek», que había barajado los nombres de Martin Landau y Michael Dunn, despejara todas sus dudas acerca del actor ideal para representar el papel de Spock.
Parte del mérito de que Leonard Nimoy se convirtiese en un icono pop fue sólo la insistencia de Roddenberry. Tras la primera exhibición de «The Cage«, los directivos de la NBC pidieron descartar el personaje de Spock por considerarlo demasiado inhumano. Roddenberry se negó a aceptar la exigencia de la cadena, Spock, dijo, era la esencia misma de la serie y su desaparición sería un desastre. Poco después con la serie ya lanzada aparecieron voces que le dieron la razón a Roddenberry y Spock se convirtió en el personaje más popular de la serie, incluso más que Kirk.
Ya bien entrados los años 1970, y sintiéndose encasillado, decide multiplicar las direcciones de su trabajo en nuevas formas de expresión artística: la teatral, la literaria, la fotográfica y la musical. De esta época es su famosa autobiografía: I Am Not Spock (1975).
Leonard Nimoy había encontrado en la pluralidad de disciplinas la forma de mantener al Sr. Spock a raya; así que, cuando Roddenberry y la Paramount le ofrecieron la oportunidad de sumarse al proyecto de una segunda fase en ese momento no se sabía si iba a ser un episodio piloto, un telefilme o un largometraje de «Star Trek«, no le costó dar una respuesta negativa.
Un retraso de dos años en el rodaje fue suficiente, sin embargo, para que Nimoy cambiara de opinión. Gracias a ello, se topó, al poco tiempo, con la oportunidad de adentrarse en otro campo creativo: la dirección cinematográfica.
Cuando se ofreció como director para la tercera entrega de «Star Trek«, algunos directivos de la Paramount mostraron cierta reticencia porque creían estar ante el típico capricho del actor estrella; el gran éxito comercial del filme demostró la capacidad de Leonard Nimoy para manejar el material de la franquicia, al punto que le ofrecieron repetir la experiencia en la cuarta película, que obtuvo aún mejores resultados de taquilla.
En 1986, cayeron en manos del actor varios proyectos, de los cuales se decidió por la adaptación estadounidense de Tres hombres y un bebé, con Tom Selleck («Magnum P.I.»), que fue otro gran éxito de recaudación en Estados Unidos.
De ahí, Nimoy ha hecho de anfitrión en la serie documental Ancient Mysteries (1994-1998). También ha producido y dirigido algunos trabajos para televisión; ha interpretado algunos renombrados «cameos» (como en los episodios de Duckman y Futurama), y realizado, junto a John de Lancie, relatos grabados de cuentos fantásticos y de ciencia ficción en la compañía Alien Voices; pero se ha dedicado en especial a la fotografía en blanco y negro y la poesía.
En el año 2002 anunció su retiro de la interpretación; sin embargo, actuó en el rodaje de la undécima entrega cinematográfica de Star Trek puesto que el director J. J. Abrams le había solicitado sus servicios para interpretar, por última vez, al legendario vulcano Spock en algunos pasajes del guion; cosa que hizo entregando una gran actuación y brindando las reminiscencias de la serie original.
SALUDO VULCANO
El gesto, que tiene el significado de «larga vida y prosperidad» es sin duda lo primero que se nos viene a la mente al nombrar tanto a la serie como al personaje que lo hizo famoso. Pero, ¿cómo se gestó?
El personaje de Spock era, por supuesto, mitad Leonard Nimoy y su viaje a las estrellas eterno. Según su autobiografía, Leonard Nimoy creó el saludo basándose en un gesto que hacen los rabinos en una de sus bendiciones sacerdotales y que forma la letra hebrea Shin. Fue entonces como se le ocurrió realizar el saludo como alternativa a un abrazo, que era el saludo original en el guión y que de acuerdo al actor, contradecía la imagen que se daba de la sociedad vulcana.
MUERTE
Leonard Nimoy murió debido a una enfermedad obstructiva pulmonar, la cual se encontraba en fase terminal, el 27 de febrero de 2015 por la mañana en su casa de Bel Air a la edad de 83 años.
VIDEO MEJORES MOMENTOS DE SPOCK