Limpiarlos siempre ha sido una tarea molesta, ya que a pesar de tus diferentes esfuerzos no siempre quedan relucientes, por ello, es necesario conocer los trucos para limpiar cristales y espejos.
La idea de este artículo de TIEMPO LIBRE es que conozcas cuáles son los trucos para limpiar cristales y espejos, y dejarlos relucientes.
Incluso cuando parecen limpios, un rayo de sol puede comprometer la reputación de limpieza en el hogar, si no están impecables.
Por consiguiente, es necesario dedicar a su limpieza una atención especial.
La parte interior de los cristales se mancha con:
- el polvo,
- las huellas de los dedos y de las moscas,
- humo,
- los vapores grasos de la cocina,
- la parte exterior,
- con los fenómenos atmosféricos
- y los humos grasos de las ciudades.
Los espejos suelen estar menos expuestos a la suciedad, y sobre todo, menos empañados por el vapor de agua y el polvo.
TRUCOS PARA LIMPIAR CRISTALES
Para elegir el producto de limpieza se tendrá en cuenta la clase de manchas, así como la eficacia y la facilidad de su aplicación.
Los limpiacristales que se vaporizan están hechos a base de disolventes diversos y de detergentes; por lo general, tanto su adquisición como la de los recambios es económica.
Los productos que se expanden con vaporizador contienen, además de un detergente, un gas propulsor, generalmente el butano, por esta razón nunca deben echarse al fuego los botes vacíos, ya que podrían estallar.
También sirven los limpiacristales en forma de pasta o crema, para extender sobre el cristal, se componen de un detergente y abrasivos muy finos que se depositan después de evaporarse el disolvente.
Estos productos están indicados sobre todo para limpiar los cristales muy grasientos o manchados, pero a veces presentan el inconveniente de formar mucho polvo al secarlos.
Los productos con siliconas disminuyen la adherencia de las posibles manchas, durante cierto tiempo después de haber aplicado estos productos basta con pasar un paño a los cristales para que recobren todo su brillo.
Además los paños y papeles impregnados o tratados con silicona permiten una limpieza fácil, sin necesidad de añadir otro producto.
Los productos anti vaho se aconseja sobre todo para los cristales de espejos de duchas y cocinas, pues evitan que estos se empañen durante unos días.
Los antiguos procedimientos para limpiar los cristales con:
- papel periódico
- o trapos empapados en agua
- y detergente o agua de vinagre siguen siendo válidos y muy económicos, pero más difíciles y menos rápidos.
CÓMO LIMPIAR UN ESPEJO
Antes de limpiar los cristales con el producto elegido se ha de limpiar el polvo de los marcos y antepechos de las ventanas.
Después de vaporizar el limpiacristales o extenderlo con un trapo o una esponja, se seca con un paño de lino o de estambre, insistiendo en los ángulos, y por último se saca brillo con una gamuza.
En caso de tener grandes superficies acristaladas, el trabajo se hace con más rapidez si se emplea una espátula de goma provista de mango.
No deben limpiarse los cristales cuando les da el sol de lleno, los disolventes se evaporan antes de actuar y la reverberación hace el trabajo más difícil.
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FUENTE: Enciclopedia de la Mujer.