Saltar al contenido
TiempoLibre

La última voluntad del creador de ‘Los Simpsons’

Compartir

sam

Sam Simon tiene muy claro lo que hará con sus muchos millones de dólares y con sus pocos meses de vida. El pasado 16 de mayo le comunicó a su entorno y al mundillo televisivo su diagnóstico mortal, una batalla perdida contra el cáncer que le dejará tiempo para terminar algunos proyectos de trabajo pendientes y para hacer todo el bien que le sea posible.

Es la crónica de una muerte anunciada para uno de los grandes genios del gremio, el creador junto a Matt Groening de «Los Simpsons», un hombre que pese a haberse alejado de la brillante serie animada en 1993, siguió cobrando decenas de millones de dólares anuales por los derechos de su creación, además de conservar el título de productor ejecutivo.

Simon ya ha dicho que seguirá alimentando mascotas y seres humanos, en un abanico de contribuciones filantrópicas que ha ido creciendo con los años y que ahora presenciará una cascada final.

«La verdad es que tengo más dinero del que estoy interesado en gastar», confiesa Simon en una entrevista con The Hollywood Reporter. «Todo el mundo en mi familia está cubierto, así que disfruto haciendo esto». El productor y creativo de 58 años se refiere a los perros que ha ayudado a sacar adelante a través de su fundación a lo largo de los años.

«Sencillamente soy un adorador de animales. Me gusta conocer gente a cuyos perros hemos salvado con nuestro programa de cirugía gratuita», explica. Pero no solo los canes han sido su causa. La organización PETA, que se ocupa de la defensa de todo tipo de animales, le puso su nombre a un edificio en Virginia por sus generosas donaciones, tanto dinero hasta la fecha que confiesa no saber exactamente cuánto ha salido de sus cuentas bancarias.

Simon, nacido en California en 1955, comenzó a trabajar en «Los Simpsons» en 1989 junto a Matt Groening y James L. Brooks. Es el responsable de haber escrito ocho de los primeros episodios, de haber ayudado a formar el primer equipo de guionistas y de haber dotado a la serie de su estilo y sensibilidad, un hombre soltero y sin hijos que parece tener perdida la batalla contra el cáncer de colon.

Hace cinco meses que sabe que su genio, por desgracia, se agotará en breve.

elmundo.es


Compartir